miércoles, 16 de mayo de 2012

Tema 11(2º). Textos sobre el arte Barroco

<<[...] Sus artistas se proclamaron herederos del Renacimiento, declarando que aceptaban sus reglas. Pero las violaban sistemáticamente. El Renacimiento había sido equilibrio, medida, sobriedad, racionalismo, lógica. El Barroco fue movimiento, ansia de novedad, amor por lo infinito y lo no finito, por los contrastes y por la mezcla audaz de todas las artes. Fue tan dramático, exuberante y teatral, como serena y contenida había sido la época precedente.>>
>>El hecho es que las finalidades de los dos movimientos eran diferentes y, por tanto, se adoptaban medios diversos. O, más bien, opuestos. El Renacimiento se dirigía a la razón: quería, sobre todo, convencer. El Barroco, en cambio, apelaba al instinto, a los sentidos, a la fantasía: es decir, tendía fascinar. No por casualidad había nacido como instrumento artístico de la Iglesia católica, que en ese periodo tendía a recuperar a los herejes, o por lo menos a consolidar la fe de los creyentes, impresionándolos con toda su majestad.>>
CONTI, Flavio, Como reconocer el arte Barroco, Barcelona, EDUNSA, 1993, pág. 4.
Dome San Carlo alle Quattro Fontane 2006
Cúpula de San Carlos de las cuatro fuentes de Borromini
Fuente: «Dome San Carlo alle Quattro Fontane 2006» por Jastrow - Trabajo propio. Disponible bajo la licencia Public domain vía Wikimedia Commons.

<<[...] Refiriéndose [el historiador del arte Heinrich Wölfflin y sus seguidores] siempre al arte del siglo XVII y principios del XVIII, definieron como barrocas aquellas obras en las que aparecían determinadas características: la búsqueda del movimiento, tanto real (una pared ondulada, una fuente en la que el agua cae en formas siempre nuevas), como sugerido (un personaje retratado durante una acción violenta o un esfuerzo); la tentativa de representar, o sugerir, el infinito (un camino que se pierde en el horizonte, un fresco simulando una bóveda celeste, un juego de espejos que altere y haga irreconocibles las perspectivas); la importancia dada a la luz y a los efectos luminosos en la percepción final y en la concepción misma de la obra de arte; el gusto por lo teatral, por lo escenográfico, por lo fastuoso; la tendencia a no representar los confines de las disciplinas, es decir a mezclar, arquitectura, escultura y pintura. [...]>>
CONTI, Flavio, Como reconocer el arte Barroco, Barcelona, EDUNSA, 1993, págs. 8 y 9.
SCarloQuattroFontaneRome2
Fachada de San Carlos de las cuatro fuentes de Borromini (movimiento)
Fuente: By Welleschik (Own work) [CC-BY-SA-3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0)], via Wikimedia Commons
Teresabernini
El éxtasis de Santa Teresa  de Bernini (movimiento)
Fuente: By Napoleon Vier (Own work) [GFDL (http://www.gnu.org/copyleft/fdl.html), CC-BY-SA-3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/) or CC-BY-SA-2.5 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/2.5)], via Wikimedia Commons
Cortona Triumph of Divine Providence 01
Triunfo de la Divina Providencia de Pietro da Cortona (infinito)
Fuente: Pietro da Cortona [Public domain], via Wikimedia Commons
Michelangelo Caravaggio 040
La vocación de San Mateo de Caravaggio (luz)
Fuente: By Michelangelo Merisi da Caravaggio [Public domain], via Wikimedia Commons
Bernini Baldachino
El Baldaquino de Bernini (escultura y arquitectura)
Fuente: By NicvK [Public domain], via Wikimedia Commons
Las Meninas, by Diego Velázquez, from Prado in Google Earth
Las Meninas de Velázquez (infinito con espejos)
Fuente: Diego Velázquez [Public domain], via Wikimedia Commons