Un clásico en el estudio de la geografía regional mundial en España es el libro del que extraigo la cita que incluyo a continuación. Debido a su complejidad y elevado nivel he considerado conveniente abreviar y adaptar el texto.
Europa aparece dominada por tres grandes áreas climáticas. La primera se identifica con el clima oceánico de costa occidental dominante en toda la vertiente atlántica desde Noruega al litoral gallego, y caracterizado por temperaturas suaves todo el año, precipitaciones abundantes y regulares, sin estación seca. Estas condiciones favorecen el desarrollo de una densa vegetación identificada por el bosque caducifolio (hayas, robles, castaños...). Las precipitaciones y el predominio de las llanuras en gran parte del centro de Europa unos ríos de caudal, régimen regular y una velocidad escasa que favorecen su navegabilidad, factor de gran importancia en el proceso de industrialización europea como medio de transporte barato para mercancías voluminosas.
Al alejarnos de la costa atlántica en dirección este, las amplitudes térmicas estacionales (temperatura mensual más elevada menos la temperatura mensual más baja) van elevándose debido al descenso de las temperaturas invernales, al tiempo que se reducen las precipitaciones y tienden a producirse en los meses de verano, lo que nos introduce en el dominio del clima continental húmedo.
En el margen meridional del continente domina el clima subtropical de costa occidental o mediterráneo que aquí integra desde la costa portuguesa a la del Mar Negro. Su rasgo más destacado es la creciente sequedad, particularmente en verano, que junto a la irregularidad de las precipitaciones anuncian la proximidad de las regiones desérticas saharianas. En el predomina el bosque mediterráneo (encinal, alcornoques...) adaptado a la sequía estival y especies arbustivas de tipo garriga (coscoja, retama...) o maquís (jara, romero, brezo...). Los ríos mediterráneos afectados por los fuertes estiajes de su régimen y la grandes pendientes habitualmente ha impedido que sean navegables salvo tramos limitados.
Junto a estos tres grandes dominios ecológicos, baste señalar la existencia de una pequeña franja de clima ártico en el norte de Escandinavia y Rusia caracterizado el dominio de la tundra sobre un suelo permanentemente helado.
MENDEZ, Ricardo y MOLINERO, Fernando, Espacios y sociedades. Introducción a la geografía regional del mundo. Barcelona, Ariel, 1994, pp. 88 y 90.